Por lo menos esta es la historia de cientos de niñas que sueñan con hacer realidad este momento.
Para muchas es un sueño casi imposible porque lamentablemente no nacimos en la realeza, nacimos en familias normales, con padres trabajadores, hermanos con los que nos peleamos siempre, aunque los amamos, tíos especiales, primos cómplices y abuelitos que nos tapan todas las travesuras, estas son nuestras familias reales.
Así que esperamos a que llegue el famoso día en el que cumplimos 15 o 16 años, la ocasión especial para ser "Princesas por un Día" en donde el centro de atención, todas las miradas y todo lo que queramos hacer se nos convierte en realidad.
Pero esto no es tan sencillo como se ve, o como muchas personas incluso las quinceañeras piensan. Es un sacrificio que por siempre deberian estar agradecidas, de nunca olvidar y de valorar cada esfuerzo de todos aquellos que aportaron para este hermoso dia, pero en especial el de sus padres, que a pesar de en muchas ocasiones tener que privarse de algunas cosas, no les importa, porque lo que en realidad quieren es hacer que sus pequeñas princesas tengan un dia magico en sus vidas.
Por este motivo, nuestro profundo respeto y admiración para todos aquellos padres, que sin importar lo que tengan que hacer, han hecho realidad este momento.
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